sábado, 24 de mayo de 2008





He pensado en tu espalda. Por minutos tan grandes solo he jugado en el mismo lugar. y como solo he podido imaginarte, ahora invento nuevas formas de recordarte.

Esto de extrañar tiene diversos recovecos. Unas veces visualizas con sutil encanto cada pedacito de memoria. Le añades un beso. Le quitas las ganas de otro, y eliminas las palabras y los hubieras. A veces dejas sola la ansiedad. Te dejas llevar por las miradas y abstraes entonces uno de tus sentidos. Vagamente aparecen imágenes que estaban ahí como guardianes escondidos. Precisamente se está dibujando en mi mano tu mano. Esa mano acariciada pocas veces, con tanta ternura. Fue suficiente. Ahora no lo es. Quisiera tenerla aquí y deslizar en ella esta piel fría y besar todos tus dedos. volvería a sentirme tibia y protegida.

De repente tu olor. Ese olor está solo. Y se percibe, una corazonada. Cierro los ojos y sigo... Me sentí tan desprendida de mí cuando te aspiraba. Quería ser tu cuello, quería buscar la forma de estar cerca . Aunque sea un poco. Y sentirme dentro.

Todas las imágenes empiezan en humo oscuro que se multiplica en noche. Tu eres el centro. Dominas. Yo te siento siempre, aun antes de tocarte.
Me detengo a tratar de pensar en otra cosa. Justo iba a cerrar los ojos. Ahora tu voz. Qué me decías?... olvidé las palabras exactas. Yo te dije que te quiero. Busqué tu boca. Ahora la veo, me aproximo. Sonrío. Puedo ver como sonríes, y quiero sentir lo mismo que tú.

1 comentario:

Agustín Cardozo dijo...

Recuerdos extasiados....

Besos.....Muchos Besos