jueves, 14 de febrero de 2008
*Yo respira, sobrevive con esa habla que eres tú, y los demás se asustan. Está bien. Así debe ser.
Soñé que me acariciaban, que tenía un cuerpo y lo acariciaban, que alguien bebía y me daba de beber, y reconocía que en mis ojos se puede estar, quedarse, y los árboles de aquel parque volvían a refugiárseme entre los dedos, soñé que había una sombra y que no me daba miedo, soñé que el cuerpo guardaba un canto, y cantaba, y todo iba y venía, y de las noches de ahora no había huella.
Trae romero y laurel blanco, menjuí y ámbar, confórtame que estoy sin dueña, y en esta alma no puedo ya.
Anoté los ritmos de tu ánfora secreta, reina, te deshago con palabras.
Para encantar....
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2 comentarios:
señorita hermosa con los cabellos de fuego, me gusta lo que escribe, me gusta, saludos. complice de palabras.
un poco abandonado tenia a todo lo que de internet se trataba pero trato de retomarlo. besos.
Safo.
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